Nearshoring ¿Qué significa para el Sector Agroalimentario?

Poco se ha hablado de este tema en el sector Agroalimentario. Escuchamos mucho del “Nearshoring” en industrias como la automotriz y electrónica, sin embargo, dentro del sector agroalimentario también existe una importante oportunidad.

El “Nearshoring” es la estrategia de negocios que permite a las compañías acercar los centros de producción a sus mercados de consumo. Al contar con cadenas de suministro más cortas, se obtienen beneficios en materia de logística y de transporte., lo que permite dar respuestas rápidas y flexibles a las necesidades del cliente.

Esta reconfiguración geográfica del comercio y la producción en el sector agroalimentario obedece a los impactos que se tuvieron durante la pandemia por las disrupciones en la cadena de suministro y por conflictos internacionales.

Abordando los problemas que se presentaron en la cadena de suministro; la crisis de los contenedores, donde miles de barcos se quedaron varados en puertos de América y Europa sin poder transportar mercancías a Asia principalmente, propició que los costos de transporte marítimo se incrementaran hasta 5 veces.

De acuerdo con datos del U.S. Department of Agriculture (USDA), los costos de transportación marina de Estados Unidos al puerto de Veracruz se incrementaron 61.8% de marzo 2020 a marzo de 2022 y los costos de transporte terrestre desde Estados Unidos a Guadalajara subieron un 3.7% en el mismo periodo.

En el caso de los productos del sector agroalimentario, Jacobo Cabrera, presidente de los Consejos Agroalimentarios de México comentó que el costo de la logística de productos que participan en el comercio internacional representa el 48% de la composición de costos totales.

Existen muchas cuestiones que vuelven al “Nearshoring” relevante y que debemos aprovechar para impulsar el crecimiento en el sector tal como: los costos logísticos, los acuerdos comerciales, las barreras de idioma, zona horaria, inclusive las similitudes culturales.

De acuerdo con el informe de PWC “Cómo México podría beneficiarse de un reajuste en las cadenas de suministro globales”, el sector agroalimentario tiene un amplio potencial para aprovechar esta tendencia ya que afirman que nuestra capacidad manufacturera en alimentos envasados es superior a las de Vietnam, Malasia e Indonesia y muy cercana a las de Tailandia y China.

1) Ahorro de costos y de tiempo.

El tema central de todo esto. Las empresas quieren ahorrar, y el mover sus mercancías desde cualquiera de los países asiáticos (Corea del Sur, Taiwán y Singapur) es cada vez más costoso. Mientras un contenedor de 40 pies proveniente de China hacia Estados Unidos tiene un costo de transporte de 4,000 dólares y cerca de 5 semanas de traslado; en México, el costo es menos de la mitad y solo toma unos cuantos días.

2) Mano de obra a buen precio y calificada.

Un trabajador promedio en México cuesta cerca de 3.90 dólares frente a 4.50 dólares en China y presenta una tasa de crecimiento salarial anual 2% inferior a la del país asiático.

3) Infraestructura y tratados comerciales.

13 tratados de libre comercio con 50 países y 32 Acuerdos para la Promoción y Protección Recíproca de las Inversiones (APPRI) con 33 países, entre otros. Además, se cuenta con una red logística sólida, con más de 117 puertos marítimos, 64 aeropuertos internacionales, 27 mil km de vías férreas y 51 mil km de carreteras federales.

Dado lo anterior, el potencial del mercado Agroalimentario con el que tenemos cercanía es muy grande. Como dato relevante, de acuerdo con el USDA, el estadounidense promedio consume aproximadamente 1,885 libras (casi una tonelada) de alimento por año, estaríamos hablando de alrededor de 302.5 millones de toneladas anuales de alimentos.

Actualmente ya empezamos a ver un flujo de inversión hacia nuestro país, si bien es cierto que no es tan acelerado como en otros sectores, ya vemos planes para que México reciba a 15 empresas italianas pertenecientes a los sectores alimentario, agroindustrial, biomédico y tecnológico. Las empresas invertirán en la construcción de infraestructura y traslado de sus líneas de producción desde Asia, Estados Unidos y Europa.

De acuerdo con tendencias 2021, en la Inversión Extranjera Directa en México, Estados Unidos encabeza la lista de naciones que han planteado nuevas iniciativas y proyectos de inversión con el 25% de estos, le siguen China (21%), Corea del Sur (10%), Japón (8%) y Alemania (4%). Si lo visualizamos por sector, la mayor presencia de empresas en los parques industriales ubicados en México corresponde al sector automotriz y autopartes (24%), seguido de los centros de distribución y logística (16%), eléctrico–electrónico (7%), metalmecánico (7%) y alimentos y bebidas (5%).

Según una encuesta reciente del Banco de México, el 16 % de las empresas con más de 100 empleados en el país ya reportan beneficios del nearshoring, especialmente las empresas ubicadas cerca de la frontera con EE. UU. La mayoría de estas empresas destacaron que están recibiendo más inversión extranjera directa o están viendo un aumento en la demanda de productos de (1) empresas establecidas en los EE. UU. que anteriormente adquirieron productos o servicios de empresas en otros países; (2) firmas extranjeras que ya trasladaron sus operaciones a México; y (3) otras empresas mexicanas que se benefician del nearshoring.

En particular, el 6.9 % de las empresas encuestadas mencionaron aumentos en la demanda de empresas establecidas en los EE. UU. que antes obtenían productos de empresas de otros países. El reto aquí es lograr que el sursureste del país también se beneficie de esta ola positiva de desarrollo económico.